CAPILLA DE ORFANATO MINERO (ACTUAL FUNDOMA)



En el barrio de Villamejil, a los pies del monte Naranco, se encuentra la Fundación Docente de Mineros Asturianos (FUNDOMA), conocida hasta 1991 como el Orfanato de Mineros Asturianos.

Se trata de un conjunto de edificaciones cuyo núcleo de 1931 se ha ido extendiendo y remodelando hasta la actualidad. Entre los añadidos que se hacen a la obra original de Bustelo y Casariego, está la capilla.
Nos encontramos ante una construcción exenta que rompe con la simetría del centro del Orfanato, ideada por Julio Galán Gómez en 1957 y pero que no se llevará a cabo hasta 1960.
Aunque la primera propuesta del arquitecto hablaba de una torre-campanil exenta, coro, etc, el proyecto final será mucho más sencillo y de menor proporción.
Esta capilla consta de una única nave con laterales en forma de diente de sierra y amplios ventanales, con el ábside ligeramente curvo, rodeado externamente por la sacristía.


Detalle del "ichtus" situado en el dintel 
de la puerta
El ábside es de mayor altura que la nave, por lo que el espacio de diferencia se emplea como foco de luz con una cristalera oculta, mientras que en los lados convergentes de la cabecera, unos estrechos ventanales focalizan también la luz hacia el altar. La luz de la nave sería filtrada por vidrios de color, mientras que la del altar sería blanca, para resaltar el lugar según detallaba el arquitecto en la presentación del proyecto.

Pegada al testero sobre un fondo de madera, se ubicaba una imagen  de delicados rasgos de Santa Bárbara, de dos metros. Obra tallada, dorada y policromada por Francisco Toledo en 1958, cuando era profesor de en la Escuela de Artes y Oficios de Oviedo.

La fachada nos presenta un atrio saliente con tres puertas de salida en cuyos dinteles aparecen grabados los símbolos paleocristianos del pez con las letras griegas “ΙΧΘΥΣ” (en el centro), un crismón en el de la izquierda y una lámpara de aceite en el de la derecha. A los lados de estas tres puertas se sitúan otras dos para el acceso.

En la parte superior se abre un rosetón y coronando la fachada, tres cruces de hormigón que en algunos dibujos preliminares de Galán aparecen sirviendo de espadaña para dos campanas. Sin embargo, la única que tuvo esta capilla se colocó posteriormente encima del rosetón pendiendo de una viga de hierro.
Galán Gómez diseñará también los bancos, el altar y dos credencias, un comulgatorio y púlpitos en bronce decorado con crismones y otros tantos detalles, hoy retirados.

Estado actual de lo que sería el presbiterio. 

Desacralizada la capilla en 2009
, FUNDOMA convoca en 2015 un concurso para transformarla en espacio para la práctica del parkour, quitando todo vestigio de su uso primitivo y no solo en el interior, que ha sido totalmente modificado, sino también con la eliminación de las puertas, cegado de las ventanas, retirada de las cruces de la fachada, la campana, las vidrieras y demás elementos diseñados personalmente por Julio Galán. 


Tan solo quedan los grabados simbólicos que están sobre la entrada, pasando desapercibidos para los profanos como lo hicieron antaño, en la época para la que fueron codificados.

Vista general de algunos de los edificios que componen el FUNDOMA.



BILBLIOGRAFÍA


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